Ana de Mendoza y la Cerda (1540-1592), era hija única de Diego de Mendoza, Príncipe de Mélito y nieto del Gran Cardenal Mendoza. Diego se casó en 1538 con Catalina de Silva, hermana del entonces Conde de Cifuentes. En el centro de la actual provincia de Guadalajara se encuentra la capital del extenso señorío que poseían dichos Condes. Aquí, en CIFUENTES nació y fue bautizada la princesa de Éboli, el 29 de junio de 1540. Se desconoce exactamente el lugar en donde nació la Princesa. No obstante, debió de hacerlo casi con toda seguridad en el palacio renacentista de los condes de Cifuentes, perteneciente a la familia Silva, es decir, a la rama de la madre de doña Ana.

El palacio estaba en la Plaza Mayor de la villa, debajo del ábside de la iglesia parroquial, con la que se comunicaba por un arco que sobrevolaba la calle y que permitía a los Conde llegar a oír misa sin tener que salir de su palacio. Por desgracia no queda nada del palacio, ni descripción alguna que nos haga tener una leve idea de su aspecto, ya que en la guerra de Sucesión Felipe V ordenó demolerlo piedra a piedra y sembrarlo de sal, al apoyar su dueño don Fernando de Silva Meneses, XIII Conde de Cifuentes, a su oponente el Archiduque Carlos . En su lugar se levanta hoy un espacio de recreo y un centro de la tercera edad.

En la partida de nacimiento de la iglesia del Salvador la descubrimos con el nombre de "Juana de Silva". Fue bautizada por el canónigo de la Iglesia de Toledo, don Juan de la Cerda, siendo inscrita en el libro primero de los registros parroquiales de la misma iglesia del Salvador: "Hoy día del Señor San Pedro de Junio fue bautizada la hija del conde de Mélito, llamóse Juana de Silva, fueron los padres condes de Alyano de Almenara y bautizóla el canónigo Cerda".