Los
primeros pobladores que habitaron estas tierras
fueron los romanos, quienes no asentaron su poblado
junto al río Cifuentes, donde se encuentra
el actual Gárgoles de Arriba, sino que
se asentaron en las proximidades del cerro en
que hoy se encuentra la ermita del patrón
del pueblo, San Blas. Allí
se han encontrado y excavado los restos de una
magnífica villa romana que data del siglo
I d. J.C., de la que destacan los mosaicos multicolores
y objetos arqueológicos de gran interés
que actualmente se conservan en el Museo Provincial
de Bellas Artes de Guadalajara y en el Centro
Cultural Santo Domingo de Cifuentes, esperando
que se reconstruya el castillo de Cifuentes, donde
se ha proyectado la construcción de un
museo que versará en los restos arqueológicos
encontrados tanto en éste como en otros
poblados de la comarca de la Alta Alcarria.Tras
la reconquista a los musulmanes de la zona, a
finales del siglo XI, Gárgoles perteneció
a la Tierra y Común de Atienza, de la que
usó su fuero y atendió a su jurisdicción.
Tras muchos años de realengo, en 1434 lo
donó doña María, reina, esposa
de Juan II de Castilla, a su cortesano don Gómez
Carrillo, y el hijo de éste, Alfonso Carrillo,
lo vendió en 1476 a don Juan de Silva,
conde de Cifuentes. Este incluyó el lugar,
en 1479 en su señorío particular
y en la jurisdicción de Cifuentes. En 1644
obtuvo el título de Villa, título
del que tuvo derecho hasta los años sesenta
del pasado siglo, cuando pasó a pertenecer
al Ayuntamiento de Cifuentes, ayuntamiento al
que pertenece en la actualidad.
Quizás
lo más interesante de Gárgoles de
Arriba sea su iglesia parroquial, obra de estilo
románico rural, construida a finales del
siglo XII. De la primitiva fábrica solamente
conserva el ábside, de triple espacio,
con un elemento central semicircular, y otros
dos laterales de cuarto de círculo. En
uno de ellos se ven altas columnas adosadas, rematando
en hermosos conjuntos de capiteles con rica decoración
de hojas de acanto. Por todo el alero corren modillones
de muy variada decoración geométrica.
Puede, pues, decirse que cuenta Gárgoles
con un ejemplar, aunque fragmentario, muy interesante
del románico rural alcarreño. El
resto del templo es más moderno, del siglo
XVI, destacando lo elegante de su torre rematada
en forma piramidal muy al estilo francés.
Cercano a la villa, en la finca de las Cascadas,
de propiedad particular, y que anteriormente fue
de los marqueses de Bejucal, y luego de los de
San Miguel, se instaló en 1800 una fábrica
de papel, propiedad de Santiago Grimaud, en la
que por primera vez en España se utilizaron
diversos materiales vegetales como esparto, paja,
juncos y sarmientos, ayudándose de las
finas aguas del río Cifuentes, para producir
un papel de gran calidad. A partir de 1830, y
hasta 1848, se elaboró el papel para los
billetes de papel moneda, los primeros realizados
en España, del Banco Español de
San Fernando. En 1846 se compraron nuevas máquinas
y estuvo funcionando hasta el siglo XX, en que
la competencia de zonas más industriales
la hizo desaparecer. Es, de todos modos, muy interesante
visitar esta antigua fábrica, cuyo edificio
principal se ha transformado en
vivienda de recreo, y se rodea por todas partes
de jardines, grandes y densas arboledas, cascadas
y arroyos, así como la antigua chimenea,
en un lugar muy apartado y hermoso. Pueden verse
aquí, además, restos de estructuras
hidráulicas romanas, especialmente una
fuente-manadero y un acueducto. Señalar
también en patrimonio como ya hicimos en
el apartado de Historia, la villa romana, que
se puede visitar siguiendo el camino de la
Laguna, y en la que se pueden ver estructuras
de piedra de lo que fueron las casas de la villa
y pequeñas partes de lo que fuera una vía
romana que unía Segontia, la actual Sigüenza,
con Segóbriga, la bella ciudad romana conquense
que se encuentra junto al actual Saelices, y en
la que aún hoy se pueden ver un teatro
y un anfiteatro muy bien conservados. En el término
de Gárgoles de Arriba se fundó en
el siglo XIV el monasterio
de monjas dominicas de San Blas, sobre el lugar
en que la tradición decía que había
sido martirizado este Santo, del que la casa conventual
conservaba como reliquia su cabeza, tenida por
abogada contra los males de garganta. Se trasladó
en siglos posteriores a Cifuentes, no quedando
actualmente más que la ermita de San Blas.
Dice la leyenda que junto a la ermita hay una
serie de pasadizos en forma de cuevas subterráneas
que la
comunicaba con la Cueva del Beato, el santuario
que alberga a la Virgen de
Loreto en el pinar cifontino de la Dehesa.
Gárgoles
de Arriba es un típico pueblo castellano
y alcarreño que se asienta en plena comarca
de la Alcarria, está bañado por
el río Cifuentes que, caudaloso y limpio,
baja a dar al Tajo; este río además
de dotar al pueblo de una fértil huerta,
provoca que en sus orillas se pueda disfrutar
de emocionantes momentos en el arte de la pesca,
pues cuenta con una gran colonia de truchas que
antaño fue bien explotada con la ubicación
de dos piscifactorias en su término municipal.En
Gárgoles también se puede disfrutar
con otras actividades como la caza o el senderismo,
y se pueden consumir típicos productos
como la miel de la
Alcarria o el vino, que producen las cuevas de
origen musulmán que hay en el pueblo, y
donde no es difícil participar en alguna
opípara merienda regada con un buen caldo.
Bonita también es la vista de la Laguna
de los Tobares, desde la ermita de San Blas. En
ella se pueden ver gran cantidad de aves acuáticas
como fochas o ánades, y otro tipo de aves
como las grullas.Gárgoles de Arriba se
encuentra a 846 metros de altitud sobre el nivel
del
mar, actualmente hay censados 161 habitantes que
a todos los efectos pertenecen al Ayuntamiento
de Cifuentes, municipio del que dista Gárgoles
de Arriba en 4 kilómetros, siendo unos
70 kilómetros a los que se encuentra la
capital de la provincia y del partido judicial
al que pertenece, Guadalajara, y unos 130 de la
capital del Estado, Madrid. Respecto a la
población destacar los 161 habitantes frente
a los habitantes que hay en otros pueblos de las
comarcas de la Alcarria y de la Sierra del Ducado,
Destacar de estos datos la baja población
de éstas comarcas de la provincia de Guadalajara.
En lo que se refiere a Gárgoles de Arriba
vemos que a pesar de haber perdido población
en los últimos años la situación
no es tan delicada como la de otros pueblos alcarreños.
Así vemos que salvo
las grandes poblaciones como Cifuentes, Trillo
o Budia, sólo tiene más población
que Gárgoles de Arriba, el vecino Gárgoles
de Abajo, que por otro lado señalar que
siempre ha sido más grande.En sus cercanías
encontramos parajes de indudable belleza, como
es el Parque Natural del Alto Tajo; las tetas
de Viana; los embalses de Entrepeñas, Buendía
y la Tajera ; la Cueva de los Casares; Trillo
y en general, todo el recorrido que pateó
Cela, a quien se le ha dedicado una calle en el
pueblo, para hacer su "Viaje a la Alcarria"
en la postguerra española y su "Nuevo
Viaje a la Alcarria" en los años ochenta,
parando en ambos en Gárgoles de Arriba.
Y esto es
lo que escribió Don Camilo José
Cela de Gárgoles de Arriba en su segundo
viaje, el más reciente puesto que lo realizó
en el verano de 1986, cuando, en Rolls Royce y
con una joven de color como chófer, visitó
la comarca de la Alcarria y Gárgoles de
Arriba:"... La carretera va casi pegada al
río Cifuentes, sobre poco más o
menos, unas veces más cerca y otras más
lejos, hasta que vierte sus aguas en el Tajo.
... Las torres de refrigeración de la central
se enseñan sobre el paisaje, a la derecha
de las Tetas de Viana, o sea, al oeste, y un poco
antes; también con buena voluntad pueden
parecer dos tetas. Pronto se ven los dos Gárgoles
y no tarda en desaparecer Cifuentes, que se
esconde tras una costanilla. El río va
a la derecha del camino, su paso lo señalan
la albura de los álamos y el verdor de
la huerta que produce tomates, lechugas y otras
legumbres; al lado contrario se enseña
el erial, que es campo de color pardo y habitado
por escuerzos y caza menor ... Por el aire vuelan
los vencejos persiguiendo mosquitos, moscas y
avispas y, más alto aún, se mece
el alcotán atisbando pollos desorientados
y
gazapos distraídos ... . .. Gárgoles
de Arriba, o sea Gargolillos, queda a mano derecha
y sobre un otero; al pueblo se entra por el río
Cifuentes, por la piscifactoría de las
Cascadas, donde estuvo la primera fábrica
de papel de España; este papel tenía
tan buena calidad que lo usaban para los billetes
de banco, a lo mejor el viajero yerra y el papel
de los billetes era de Gárgoles de Abajo,
donde también había fábrica.
.. En Gárgoles hay frondosas choperas,
cuidados y amenos jardines, perros de caza bien
alimentados e instruidos, y niños en bicicleta,
muchos niños y niñas en bicicleta.
El viajero, en el cruce, se encuentra con su amiga
Nuria, que quiere subir en globo - ¿ Me
lleva ? Yo peso poco. La niña Nuria no
es catalana sino andaluza, tiene once años
y vive en Gárgoles de Arriba porque su
padre trabaja en la central nuclear. A Gárgoles
de Arriba también le llaman Toledo, el
viajero no sabría decir por qué.
El viajero y su amigo Don Basilio suben y bajan
por el pueblo, que está limpio y enseña
cierta prosperidad. Según dicen, aquí
en Gargolillos martirizaron a San Blas, todo puede
ser porque cosas más raras se han visto
; las monjas dominicas guardaban su cabeza, abogada
contra los
males de garganta, nariz y oídos, en el
monasterio que acabó viniéndose
abajo.
- ¿ Y qué fue de la santa reliquia
?
- Pues ya ve; hay quien dice que se la llevaron
a Cifuentes, pero
igual la han perdido, las reliquias acaban siempre
perdiéndose. ...
.. Don Basilio, el viajero y compaña almorzaron
en la cueva del Chiribiqui
con el esmero acostumbrado.
- ¿ Y no se harta usted ?
- No señora, que nunca bien se harta quien
de lo suyo no mata.
Gárgoles de Abajo aparece poco más
adelante ...
Una de las tradiciones que perduran hoy en día
en Gárgoles de Arriba al igual que en
muchos otros pueblos de la comarca, es la de
"los Mayos", que es una fiesta en
la que se celebra la llegada del buen tiempo
y el despertar de la naturaleza que permanece
dormida durante el frío y largo invierno.
Esta fiesta se celebra coincidiendo con el final
del mes de Abril y la llegada del florido Mayo,
de donde coge el nombre esta tradición.
Así, el treinta de Abril, se reúnen
para cortar un chopo, que la tradición
imponía como el más alto, y tras
decorársele la capota para la ocasión
se planta. Anteriormente se plantaba en medio
de la Plaza Mayor, pero en los últimos
años se planta en las Eras. "El
Mayo" que es como se llamará una
vez plantado el chopo, pasa desde ese momento
a ser el símbolo de la fiesta hasta que
sea derribado a inicios del mes de Junio.
Tras plantar "el Mayo", se procede
a la adjudicación de las mayas, que hace
años era una difícil labor que
a veces llegaba a necesitar incluso de una subasta,
por el gran número de mozas que había
en el pueblo, pero que en la actualidad se realiza
sin ningún problema por la escasez de
chicas en el pueblo.
Por la noche, tradicionalmente acompañados
de instrumentos de cuerda, los mozos rondan
de casa en casa a cada una de las mayas, cantando
estrofas que describen sus bellas figuras. Tras
dicha descripción los cánticos
de "los Mayos", desvelan a la chica
el mayo que le ha tocado.
Al día siguiente la maya solía
convidar a tortas y magdalenas al mozo que le
hubiera correspondido como mayo, siendo ésta
una forma muy común de iniciarse noviazgos
en los pueblos, aunque también la chica
se podía negar a aceptar al mayo que
le hubiera tocado, así como narra la
letra de los mayos al día siguiente al
ir a misa se pondría el mandil del otro
lado. Este último fragmento de la invitación
de la maya se había perdido pero las
chicas han decidido recuperarlo invitando a
los chicos en el momento en
que van a rondarlas. La que sí se ha
perdido es la tradición de cantar los
Mayos de la Virgen que se cantaban aprovechando
la festividad de la Cruz de Mayo. A continuación
anotamos la letra de "los Mayos" para
conseguir que nunca se pierden y se sigan cantando
la noche del 30 de Abril en Gárgoles
de Arriba :
pincha aquíPero
hay otras tradiciones que sí se han perdido,
y que entre todos deberíamos esforzarnos
para recuperarlas.
Destacan entre
las tradiciones que ya no se celebran dos, la
primera, la de las rondas navideñas,
con zambombas y panderos, almireces, bandurrias
y guitarras, y en la que los
gargoleños entonaban típicos villancicos
a pesar de las bajas temperaturas que tenemos
por esas fechas; hoy en día sólo
recorre las calles la chiquillería, en
busca de los apreciados aguinaldos.
La segunda tradición
es más espectacular, y se realizaba para
demostrar las más jóvenes que
ya eran mozas, entonces éstas pagaban
el "gallo". "El gallo" era
una tradición muy antigua, que tenía
toques mitológicos y paganos, y que mezclaba
la superstición de la España rural
con la diversión de un día de
fiesta; y que forma parte del patrimonio cultural
de Gárgoles de Arriba. El ritual consistía
en enterrar el gallo de cuello para
abajo, dejando sólo en la superficie
el pescuezo y la cabeza. A la moza se le tapaban
los ojos, se le daba vueltas para que perdiera
el sentido de la orientación y se le
daba una hoz, para que a ciegas lograra matar
al gallo. Esta es la tradición y ahí
está para ver si las chicas dan el paso
y recuperan "el Gallo". Los chicos
no tenían una manera tan espectacular
de pasar de niño a mozo, pues solamente
tenían que pagar "la ronda"
al resto de mozos.
Los gargoleños
festejan el día tres de febrero a su
patrón San Blas, santo al que se tiene
mucha fe y devoción en el pueblo. Pero
estas fiestas han cambiado con el paso del tiempo,
pues antes duraban cuatro días las fiestas:
San Blas, San Blasillo, Santa Agueda y Santa
Aguedilla, días donde no faltaba comida,
bebida y baile, baile que era amenizado por
tamboril y por flauta, y donde se recitaban
hermosas jotas y se bailaba un baile típico
en Gárgoles de Arriba, "el milano",
en el salón del tío Felipillo
recuerdan nuestros mayores que vivieron esas
fiestas a principios del siglo XX, luego no
se trasformó mucho esta fiesta, pero
cambió el lugar del baile pasando al
salón del viejo Ayuntamiento y donde
se cambiaron las jotas por una música
más de la época en la que se estaba,
poniéndose hasta arriba el salón,
llenándose de gente llegada desde muchos
pueblos
de la Alcarria. Ahora el baile se celebra en
el salón de actos del Ayuntamiento y
se ha reducido al sábado más cercano
al tres de febrero, cuando por la mañana
se celebra la típica misa en honor a
San Blas, a continuación se comen unas
rosquillas y se beben unos vinos en la Plaza
Mayor, para por la noche echar unos bailes al
son de la música entonada
por un trío. Pero aunque se ha perdido
brillo se siguen celebrando, siendo punto de
reunión para familiares y amigos a principios
del mes de Febrero.Hoy
en día las fiestas que más tirón
tienen, son las que se celebran el primer fin
de semana de Agosto, y que hacen que Gárgoles
de Arriba sea punto ineludible de visita y diversión
para miles de alcarreños ese fin de semana.
Estas fiestas nacieron con la democracia, y
están a punto de celebrar sus bodas de
plata; era alcalde Lucio Perié, y un
grupo de amigos entre los que estaba él,
tuvieron la idea de hacer una fiesta en verano
para que se pudiera disfrutar más de
las fiestas que en las fríos festejos
de San Blas. Se pensó en estas fechas
para evitar que coincidiera con las fiestas
de otros pueblos vecino sy se realizan en honor
de Nuestra Señora la Virgen
de la Asunción. Durante estos años
ha sido mucha la gente que ha colaborado para
que las fiestas se celebren año a año
y para que vayan creciendo y mejorando, a todos
ellos que han ido formando parte de las sucesivas
Comisiones de Festejos, dedicarles desde ésta
página web un aplauso y esperamos fomentar
desde aquí a las nuevas generaciones
para que ayuden en esta tarea.
Recordamos aquellos primeros grupos que tocaron
en nuestras fiestas, Azimut y Los Pillos, grupos
que tocaban los tres días que duraban
las fiestas en aquellos años. Recordáis
la pancarta que presidía esos años
las fiestas: "de viernes a domingo rollo
con los pillos". Hoy en día eso
ha cambiado puesto que las fiestas duran hasta
el lunes y porque se ha perdido ese trato familiar
que se tenía con los músicos al
tocar cada noche
un grupo diferente, y algunas como la del sábado
dos, en los escenarios de la Plaza Mayor y de
la Plaza de la Fuente. Los escenarios también
han mejorado desde los remolques de tractor
de esas primeras fiestas hasta los actuales.
El tema de las vacas también ha ido cambiando,
primero no se traían, aunque eso duró
poco, y rápidamente se empezaron a soltar
en la Plaza Sangre y Arena, propiedad de Sebastián
Benito, y que éste cedía
generosamente al pueblo. Luego pasaron a celebrarse
en la Plaza Mayor hasta que hace poco tiempo
se ha trasladado la plaza a la Plazueleta del
Clemente, para evitar que se entorpezcan la
música y las vacas. Otra novedad en los
últimos años ha sido traer un
novillo que actualmente se ha convertido en
un toro con bastantes kilos, vamos de los que
no se ven por los pueblos de la Alcarria, y
se realiza un encierro desde la Plaza de la
Fuente, pasando por la calle Real y la Plaza
Mayor, hasta la nueva plaza.
Destacar la unión y la confraternización
de toda la gente estos días, destacando
en el acto más entrañable de todos,
la cena del guisado de las vacas, en los últimos
años cordero por el problema de "las
vacas locas", el lunes por la tarde en
la Plaza Mayor y en la que comparte mantel todo
el pueblo. Y después bailando todos juntos
a los acordes de algún trío, que
durante muchos años fue el trío
"Casablanca" y los típicos
"solos" de
trompeta, interpretando el Himno de la Alegría,
con los que a todo el pueblo
se les ponía el pelo de punta y a alguno
se le escapaba alguna lagrimilla.Otra fiesta
que se celebra en Gárgoles de Arriba,
y aunque no tiene la misma repercusión
que las dos anteriores es la que se celebra
en honor de San Antonio de Padua, a mediados
del mes de Junio, y que ha quedado reducida
al acto religioso, a la rifa de ofrendas y al
típico vino español en la Plaza
Mayor, aunque algunos años contó
con la actuación de alguna
orquesta.
PEÑAS
Las peñas
han sido desde siempre un foco de animación
de las fiestas, y la verdad es que sin ellas
las fiestas no serían igual de coloridas.
Con las fiestas de Agosto nacieron las primeras
peñas, en las que los grupos de amigos
se reunían para divertirse y pasar más
animados esos días, destacaron "el
Alambre" y la peña de los mozos,
que luego pasó a llamarse la "peña
el Vaso". La primera aglutinaba a todos
los matrimonios jóvenes
del pueblo, y que se reunían en la cochera
del Pablito; la segunda tenía como lugar
de reunión una cueva, y reunía
a los jóvenes del pueblo. Luego nacieron
"el Desastre" y "el Tócame-Roque",
ambas, peñas familiares aunque se formaron
de manera diferente, así el Tócame-Roque
nació de la fusión de dos peñas,
una formada por chicos y la otra formada
por chicas; mientras que el Desastre nació
más en bloque. "La Paella"
ha hecho su buque insignia en fiestas la cueva
del Marcos, se compone de matrimonios jóvenes
y marchosos, que viven las fiestas con mucha
intensidad. Los más jóvenes se
reúnen en varias peñas: "el
To Pa Yá", "el Resbalón",
"el Descontrol", "la Movida",
"los Ilegales", "el Desmadre",
"A
pelo XIII" , ... . Todas, peñas
ubicadas en las cuevas y formadas por jóvenes
que destacan por encima de todo por sus ganas
de pasarlo muy bien estos días, llenando
de alegría los actos de las fiestas como
el pregón, el desfile de carrozas, la
cena del lunes, ... . Cada una la forman jóvenes
de unas edades parecidas, pero que entre todas
forman una piña en la que se unen las
camisetas de unas y otras formando un puzzle
de colores y de juerga. Destacar la división
en chicos y chicas como veíamos antes,
en las peñas Resbalón y Descontrol,
y en la de sus hermanos pequeños Ilegales
y Desmadre. Los niños también
se reúnen estos días y forman
peñas, como "la Casera" y "la
Calavera", pasando estos días de
una manera muy divertida.
texto
y fotos: Fernando Bermejo Batanero para ©www.cifuentesNET.com
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